Secreto de Estado hizo la mejor carrera de su campaña desde que llegó a manos de Eduardo Pianezzi y, reaccionando en los finales, le ganó al gran favorito Georgui Lui en los 1500 metros del Clásico Batalla de Junín. El zaino que defiende los colores del stud Papo’s y que fue llevado a la victoria por Víctor Díaz, tuvo las agallas como para regresar cuando ya parecía batido y voltearle la carrera al tordillo del stud Los Pandy’s, que ya tenía la carrera en el bolsillo. Tercero remató Bartton delante de El Riesgo que completó el marcador rentado.
Ante el retiro de la yegua Cruzada, en lo previo todo parecía favorable para Georgui Lui. Sin embargo, el hijo de Whywhywhy estaba lejos de ser ese caballo sólido y solvente que fue durante la segunda mitad del año pasado y los primeros meses del presente año. Había tenido una para, luego un placé ante Mar Negro, una victoria y luego el fracaso inexplicable en el Clásico OSAF (Gr. 2). Muchas pueden ser las razones para tratar de explicar la mala carrera del tordillo: el lote numeroso, los contratiempos en la subida, los tropezones. Lo cierto es que Georgui Lui debió pelear esa carrera y no lo hizo. Ahora volvía al lote cómodo, reducido, y frente a unos rivales que en el papel ya había adelantado antes (salvo por los ex juveniles que se iban sumando). Llegó la hora de la verdad y GeorguI Lui volvió a fallar, perdiendo una carrera que a media recta no podía perder.
Al darse la partida, Georgui Lui picó en punta pero de inmediato tanto Tony Manero como Secreto de Estado lo superaron –este último, cortándole la línea al tordillo-. Recorridos los primeros 300 metros, Secreto de Estado corría adelante seguido de Tony Manero que no le daba tregua. Tercero en coche corría Georgui Lui delante de Bartton. Al llegar a la curva, Secreto de Estado quiebra definitivamente a Tony Manero y se ve libre adelante. Georgui Lui pasa con suma facilidad al segundo lugar, su jinete únicamente esperando la recta. Tercera, pegado como un chicle, Bartton. Así desembocan al derecho, con Secreto de Estado por los palos quemando lo que parecían ser sus últimos cartuchos. Por fuera, Georgui Lui dominaba las acciones y más bien era Bartton, por el medio de ambos, el que se insinuaba peligroso para las pretensiones del favorito. Faltando 250 metros. Georgui Lui tenía todo a su favor. Ya traía controlado a Bartton y Secreto de Estado por los palos no aparentaba ya mayor peligro. Pero 100 metros más todo cambió. Georgui Lui no define como esperaban sus parciales y permite que Secreto de Estado vuelva con fuerza, pegado a la baranda. La meta los sorprende en una línea, y luego la fotografía decretó que Secreto de Estado había aventajado por media cabeza a Georgui Lui. El jinete de Georgui Lui presentó reclamo por el estorbo en los primeros metros, que fue desestimado.
De esta manera, Secreto de Estado consigue el mejor triunfo de su campaña. Su victoria tiene mérito porque hoy nadie le regaló nada al zaino hijo de Lion Hearted, salió a correr fuerte desde el vamos, despanzurró a Tony Manero y en la recta, cuando ya parecía batido, volvió para voltearle la carrera a Georgui Lui. Mérito indiscutible para su preparador Eduardo Pianezzi, que redondea así una gran semana.
Georgui Lui quedó nuevamente en deuda. Esta tarde, las tuvo todas consigo y no fue capaz. Tampoco sale de escena, pero como dijimos líneas arriba, ya no es la figura excluyente que era antes. El título de la media distancia sigue vacante.
El tiempo fue de 1’33”2/5 para los 1500 metros en pista de arena.
Ante el retiro de la yegua Cruzada, en lo previo todo parecía favorable para Georgui Lui. Sin embargo, el hijo de Whywhywhy estaba lejos de ser ese caballo sólido y solvente que fue durante la segunda mitad del año pasado y los primeros meses del presente año. Había tenido una para, luego un placé ante Mar Negro, una victoria y luego el fracaso inexplicable en el Clásico OSAF (Gr. 2). Muchas pueden ser las razones para tratar de explicar la mala carrera del tordillo: el lote numeroso, los contratiempos en la subida, los tropezones. Lo cierto es que Georgui Lui debió pelear esa carrera y no lo hizo. Ahora volvía al lote cómodo, reducido, y frente a unos rivales que en el papel ya había adelantado antes (salvo por los ex juveniles que se iban sumando). Llegó la hora de la verdad y GeorguI Lui volvió a fallar, perdiendo una carrera que a media recta no podía perder.
Al darse la partida, Georgui Lui picó en punta pero de inmediato tanto Tony Manero como Secreto de Estado lo superaron –este último, cortándole la línea al tordillo-. Recorridos los primeros 300 metros, Secreto de Estado corría adelante seguido de Tony Manero que no le daba tregua. Tercero en coche corría Georgui Lui delante de Bartton. Al llegar a la curva, Secreto de Estado quiebra definitivamente a Tony Manero y se ve libre adelante. Georgui Lui pasa con suma facilidad al segundo lugar, su jinete únicamente esperando la recta. Tercera, pegado como un chicle, Bartton. Así desembocan al derecho, con Secreto de Estado por los palos quemando lo que parecían ser sus últimos cartuchos. Por fuera, Georgui Lui dominaba las acciones y más bien era Bartton, por el medio de ambos, el que se insinuaba peligroso para las pretensiones del favorito. Faltando 250 metros. Georgui Lui tenía todo a su favor. Ya traía controlado a Bartton y Secreto de Estado por los palos no aparentaba ya mayor peligro. Pero 100 metros más todo cambió. Georgui Lui no define como esperaban sus parciales y permite que Secreto de Estado vuelva con fuerza, pegado a la baranda. La meta los sorprende en una línea, y luego la fotografía decretó que Secreto de Estado había aventajado por media cabeza a Georgui Lui. El jinete de Georgui Lui presentó reclamo por el estorbo en los primeros metros, que fue desestimado.
De esta manera, Secreto de Estado consigue el mejor triunfo de su campaña. Su victoria tiene mérito porque hoy nadie le regaló nada al zaino hijo de Lion Hearted, salió a correr fuerte desde el vamos, despanzurró a Tony Manero y en la recta, cuando ya parecía batido, volvió para voltearle la carrera a Georgui Lui. Mérito indiscutible para su preparador Eduardo Pianezzi, que redondea así una gran semana.
Georgui Lui quedó nuevamente en deuda. Esta tarde, las tuvo todas consigo y no fue capaz. Tampoco sale de escena, pero como dijimos líneas arriba, ya no es la figura excluyente que era antes. El título de la media distancia sigue vacante.
El tiempo fue de 1’33”2/5 para los 1500 metros en pista de arena.
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