El potrillo chileno Mr. Dany capitalizó un desarrollo muy favorable y logró escapar a tiempo para imponerse en el Clásico Polla de Potrillos (Gr. 1), primera corona del turf peruano. El hijo de Powerscourt, impecablemente corrido por Carlos Trujillo y muy bien presentado por Arturo Morales, derrotó a su compañero de corral Fly Lexis Fly, que realizó una estupenda actuación. Tercero, apareciendo como un fantasma y volando en los finales, remató el favorito Invictus, que pagó tributo a la colocación que le tocó en el partidor y a su falta de ligerezas en la subida. Cuarto remató Mr. Ninmar.
La carrera tenía a dos figuras excluyentes en lo previo: Invictus y Mr. Dany. Ambos venían de medirse en la milla del Clásico Hipódromo de San Felipe y la victoria había sido para Invictus, en forma categórica. Pero en esa carrera corrieron cuatro y ahora eran quince los potrillos en la partida, y a Invictus le había tocado el cajón 2 del partidor, que en la milla suele ser fatal. Por su parte, Mr. Dany había brillado en sus aprontes previos y en su tienda se cuidaron de inscribir a cuatro potrillos que tratarían de ayudarlo, a la par de hacer su carrera: Mr. Ninmar, Fly Lexis Fly, Mr. Tremendo y King Flower. A la hora de la verdad, la colocación en la partida resultó siendo determinante para las pretensiones de Invictus, que tuvo una subida complicadísima. De ello sacó partido Mr. Dany, que corrido como un ángel por Trujillo, dominó en el momento justo y sacó la ventaja suficiente como para contener el envión final de Invictus, que llegó muy cerca. Y entre los dos, se coló Fly Lexis Fly que superó expectativas.
Al darse la partida, Invictus picó con el lote pero de inmediato acusó falta de ligerezas y quedó al fondo. Atila salió a tomar la punta, seguido de Mr. Ninmar. Siguió porfiando el jinete de Mr. Ninmar y el alazán del Doña Licha se hizo del comando. Atila corría segundo, delante de Inolvidable, Mr. Tremendo y Mr. Dany que corría muy bien colocado. Mientras tanto, Talaverano llevaba a Invictus por fuera del lote, el cual venía comiéndose toda la arena que le caía encima. Así llegan al poste de los 800, con Mr. Ninmar enseñando el camino sobre Mr. Tremendo. Por los palos se metía a la pelea Fly Lexis Fly delante de Mr. Dany cuyo jinete solamente esperaba la recta para hacer correr. Por su parte, Invictus iba asomando por fuera, muy buscado por Talaverano. Desembocan al derecho y Mr. Dany se va sobre Mr. Ninmar y lo domina, cortándose ganador hacia la meta. Por los palos avanza su compañero de corral Fly Lexis Fly y muchísimo más abierto, avanzando muy tarde para la cita, aparece Invictus. En los últimos 250 metros, Mr. Dany tiene controlado a su pareja Fly Lexis Fly –que se convirtió en un hueso durísimo de roer-, mientras que Invictus recién tomaba fuerza y atropellaba comiéndose la cancha. Los últimos metros están cargados de emoción, porque Invictus literalmente volaba pero no llegó a alcanzar. La meta los sorprende con Mr. Dany adelante, 3/4 de cuerpo de ventaja sobre Fly Lexis Fly a ahí nomás, a un cuerpo del ganador, el favorito Invictus.
De esta manera, Mr. Dany se cobra la revancha ante Invictus pero lo hace en la carrera grande, en el Grupo1, y le otorga la primera corona para las sedas del stud Doña Licha, que está pisando muy fuerte en el turf peruano. Mr. Dany es un castaño poderoso, nacido en Chile, un hijo de Powerscourt que vendió el Haras Paso Nevado. Gran trabajo el realizado por el equipo de Arturo Morales, que colocó al primero, segundo y cuarto de la carrera. En efecto, el americano Fly Lexis Fly hizo un magnífico placé, demostrando que conforme vaya madurando como caballo podrá ser mucho más importante. Y Mr. Ninmar cumplió con una punta sostenida y firme, teniendo fuerzas como para conservar el cuarto puesto.
Párrafo aparte merece Invictus. Era el favorito de la prueba pero daba la ventaja de largar muy cerca de los palos en la milla y en un lote numeroso. En la semana lo habían llevado al partidor para sacarle ligereza pero no fue suficiente. Hoy Invictus, con tanta pólvora metida por los ligeros, tuvo una subida durísima, costándole mucho seguir el ritmo. Terminó completamente cubierto de arena y cuando por fin avanzó, era demasiado tarde. Aun así, el hijo de Apprentice descontó valientemente y llegó muy cerca. En el Ortiz será bravísimo.
El tiempo fue de 1’39”4/5 para los 1600 metros en pista de arena.
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