Si había ciertas dudas antes de la carrera sobre un desarrollo desfavorable, la bajada de distancia y la presencia de un puntero peligroso con todo a su favor, Interoceánico se encargó de borrarlas de un plumazo con el simple pero contundente argumento de su manifiesta superioridad. Este domingo, Interoceánico ratificó con creces ser el mejor caballo del momento en la arena del Hipódromo de Monterrico y se adjudicó con suma facilidad y total justicia los 2000 metros del Clásico Alfredo Benavides y Alfredo Benavides Diez Canseco. Spicer Boy, fiel a su libreto, vino de atrás para ocupar el placé mientras que el puntero Koko Mambo volvió a fallar y terminó cerrando filas.
Interoceánico había cerrado su brillante año 2010 con una victoria contundente en los 2400 metros del Clásico Hipódromo de Monterrico (Gr. 2). En su tienda optaron por lo razonable: dejarlo en la arena y olvidarse de una nueva incursión en el pasto. El hijo de Privately Held reaparecía luego de dos meses, siempre con Carlos Trujillo en lomos, y salía con aprontes cómodos. Pero como dijimos al principio de la nota, había cierto recelo sobre lo que podría ser la actuación de Interoceánico en su retorno. Por un lado, el hecho estadístico de que el castaño del Gina Santa Rosa nunca había ganado en los 2000 metros. Aunque su campaña sí registra sendas victorias en distancias menores, Interoceánico aparecía en el papel como neto fondista, de 2000 para arriba. Y estaba además el hecho de que al frente tenía a Koko Mambo, que iba a ser el puntero y que contaría con el desarrollo de la carrera a su favor. Un Koko Mambo que ya había sabido ligerearlos tanto a Spicer Boy como al mismo Interoceánico en los 2100 metros del Clásico Ernesto Ayulo Pardo (L), corrido en abril del año pasado. Pero también era cierto que esta nueva versión 2011 de Koko Mambo está muy lejos de ser lo que fue el caballo del San Pablo cuando estaba en su plenitud.
A la hora de la verdad, Interoceánico acabó con los dimes y diretes previos y se impuso categóricamente, reteniendo inobjetablemente el cetro de las pistas. Trujillo lo trajo cerca de Koko Mambo, sin perderle pisada al puntero. Hubo un momento, allá por el poste de los mil metros, que dio la impresión de que Koko Mambo podría ser peligroso. Pero en la curva ya estaba Interoceánico pisándole los talones al hijo de Apprentice y en la recta final, bastó que Trujillo llamara al orden al pupilo de Víctor Espinoza para que Interoceánico dominara sin problemas y se mandase mudar y cruzase el disco con más de cuatro cuerpos a su favor, en cómoda acción.
Gran victoria la que consiguió esta tarde Interoceánico, demostrando haber alcanzado la consagración definitiva. Hoy por hoy, es sin duda alguna el mejor de la cancha y por el momento no parece haber caballo que le haga sombra.
Spicer Boy cumplió con su placé. Rendidor y parejo, es un verdadero reloj el hijo de Lemon Drop Kid. Y en cuanto a Koko Mambo, nuevamente con todo a su favor, volvió a defraudar. Al igual que en su carrera anterior, no luchó un solo metro. Algo anda mal con el castaño.
El tiempo fue de 2’06”3/5 para los 2000 metros en pista de arena.
Interoceánico había cerrado su brillante año 2010 con una victoria contundente en los 2400 metros del Clásico Hipódromo de Monterrico (Gr. 2). En su tienda optaron por lo razonable: dejarlo en la arena y olvidarse de una nueva incursión en el pasto. El hijo de Privately Held reaparecía luego de dos meses, siempre con Carlos Trujillo en lomos, y salía con aprontes cómodos. Pero como dijimos al principio de la nota, había cierto recelo sobre lo que podría ser la actuación de Interoceánico en su retorno. Por un lado, el hecho estadístico de que el castaño del Gina Santa Rosa nunca había ganado en los 2000 metros. Aunque su campaña sí registra sendas victorias en distancias menores, Interoceánico aparecía en el papel como neto fondista, de 2000 para arriba. Y estaba además el hecho de que al frente tenía a Koko Mambo, que iba a ser el puntero y que contaría con el desarrollo de la carrera a su favor. Un Koko Mambo que ya había sabido ligerearlos tanto a Spicer Boy como al mismo Interoceánico en los 2100 metros del Clásico Ernesto Ayulo Pardo (L), corrido en abril del año pasado. Pero también era cierto que esta nueva versión 2011 de Koko Mambo está muy lejos de ser lo que fue el caballo del San Pablo cuando estaba en su plenitud.
A la hora de la verdad, Interoceánico acabó con los dimes y diretes previos y se impuso categóricamente, reteniendo inobjetablemente el cetro de las pistas. Trujillo lo trajo cerca de Koko Mambo, sin perderle pisada al puntero. Hubo un momento, allá por el poste de los mil metros, que dio la impresión de que Koko Mambo podría ser peligroso. Pero en la curva ya estaba Interoceánico pisándole los talones al hijo de Apprentice y en la recta final, bastó que Trujillo llamara al orden al pupilo de Víctor Espinoza para que Interoceánico dominara sin problemas y se mandase mudar y cruzase el disco con más de cuatro cuerpos a su favor, en cómoda acción.
Gran victoria la que consiguió esta tarde Interoceánico, demostrando haber alcanzado la consagración definitiva. Hoy por hoy, es sin duda alguna el mejor de la cancha y por el momento no parece haber caballo que le haga sombra.
Spicer Boy cumplió con su placé. Rendidor y parejo, es un verdadero reloj el hijo de Lemon Drop Kid. Y en cuanto a Koko Mambo, nuevamente con todo a su favor, volvió a defraudar. Al igual que en su carrera anterior, no luchó un solo metro. Algo anda mal con el castaño.
El tiempo fue de 2’06”3/5 para los 2000 metros en pista de arena.
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